SOMIERES Y BASES (II)

Además de las bases y somieres con láminas hay una segunda opción para proporcionar soporte a nuestro colchón: las bases rígidas o de tablero.  

 Existen varios tipos: la base tapizada simple, el canapé, el canapé abatible, con cajones, etc. En todas estas opciones el elemento más importante a valorar es la robustez. Tanto la base tapizada normal como el canapé consta en su parte superior de un tablero soportado generalmente por una estructura de acero. Es relevante el grosor y material de dicho tablero, siendo poco recomendables aquellos fabricados en una especie de cartón prensado, que si bien resultan mucho más económicos tienen una corta vida y soportan poco peso. Lo mejor es que ese tablero sea de aglomerado. La estructura de acero también es importante; cuántos más travesaños soporten la tapa mayor será su resistencia, y cuanto mayor sea el grosor del tubo de acero utilizado también ganaremos en durabilidad. Estas características son mucho más importantes cuando se trate de equipos en medidas de matrimonio, ya que a mayor anchura de la cama mayores son las posibilidades de que los tubos y el tablero se doblen hacia el centro.

 En el caso de los canapés abatibles con arcón de almacenamiento debemos tener en cuenta también el grosor de los laterales y el fondo del cajón, además de fijarnos en qué tipo de apoyo tienen contra el suelo. Los canapés de cajones también son una excelente opción, aunque ofrecen menor espacio de almacenamiento.

 Las bases rígidas son ideales para colchones con núcleo de muelles, ya que su transpiración no se ve resentida por el hecho de tener debajo un tablero en lugar de láminas. Estudia todas estas cuestiones antes de decidirte por una u otra opción.

 Buen descanso :)

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